Muchos gestores cometen el error de ver los mercados como escenarios estáticos. Solo perciben el cambio cuando este toca a su puerta, desestabilizando la empresa.
¿Cuántas veces hemos escuchado a gestores afirmar que sus productos son únicos? Nuevos competidores, nuevos productos, nuevas reglas, nuevos hábitos: son innumerables las posibilidades de cambio.
Por eso, los gestores invierten en el monitoreo de tendencias. Descubra los cinco tipos más comunes de monitoreo que utilizan la inteligencia de mercado y competitiva:
👉 Tendencias de mercado
Estar atento a lo que marca tendencia en su sector permite anticipar ajustes estratégicos y adelantarse a la competencia. Además de consumidores y competidores, este modelo de monitoreo abarca otras fuerzas que influyen en el mercado.
👉 Tendencias tecnológicas
Sus competidores están invirtiendo en innovación. ¿Usted sabe cómo? El monitoreo de tendencias tecnológicas implica la investigación del estado del arte y la búsqueda de patentes.
👉 Señales débiles
El monitoreo constante permite identificar señales débiles de cambio en el mercado antes de que se conviertan en tendencia. Esta información brinda a la empresa la oportunidad de adaptarse a transformaciones que aún no han sido detectadas por la competencia.
👉 Consumidores
Comprender lo que el consumidor espera de su producto y lo que le atrae de la competencia, así como detectar cómo evolucionan sus necesidades, es esencial para mantener una estrategia actualizada.
👉 Competencia
Seguir los movimientos de la competencia debe ser una preocupación constante para cualquier negocio. Además de proporcionar información que puede fortalecer sus operaciones, el monitoreo permite anticiparse a las acciones de los competidores.

Señales
Débiles
En el ámbito de la Inteligencia Competitiva, una de las técnicas más intrigantes y capaces de producir resultados excepcionales es el análisis de señales débiles.

